Paquetes sorpresa de pescado por un tercio de su valor

Cada vez son más los negocios y usuarios de la comarca que recurren a aplicaciones informáticas que desarrollan programas centrados en la reducción de desperdicios de alimentos.

Una apuesta por la sostenibilidad que evita que acaben en la basura productos a punto de caducar, o bien de fecha inminente de consumo preferente, que se ha convertido en una herramienta cada vez más usada en restaurantes, supermercados y pescaderías, donde es frecuente desperdiciar comida.

Se hacen con un 'Too Good To Go' por 2,95€ y alucinan con todo lo que trae

También se aprecia el tirón en plazas de abastos como la de Vilagarcía, donde poco a poco aumenta el número de negocios de venta de pescados y mariscos adheridos a aplicaciones como “Too Good To Go”, usadas, precisamente, para vender excedentes.

Si trabajas buen producto y pones precios razonables, la gente responde y acude a la plaza a comprar, porque sabe que aquí pueden encontrar producto fresco y de calidad

Vendedores de la plaza

Paquetes sorpresa

Se emplea la fórmula de los “paquetes sorpresa”, mediante los cuales los establecimientos adheridos frecen sus productos a tarifas muy rebajadas y los clientes consiguen comida de calidad a un precio casi inmejorable.

“Habitualmente sobra pescado cuando termina la jornada, por lo que tenemos que llevarlo a casa para autoconsumo o bien tirarlo”, explica Peregrina Abad, una de las participantes en este proyecto.

Lo hace desde Pescados y Mariscos María Sabarís, una conocida firma local adherida a “Too Good To Go” para así evitar desperdiciar producto.

Variadas especies

“Antes de cerrar, lo que hacemos es elaborar paquetes sorpresa valorados siempre en más de 15 euros, por lo que incluimos chinchos, xoubas, merluza, rapantes o cualquier otro producto, y lo que hace el cliente es reservar el paquete a través de la aplicación, pagando solo 5 euros, para venir a recogerlo a última hora”, esgrime la pescantina.

Grandes marcas piden no tirar comida con fecha consumo preferente vencida

“Cada vez hay más gente que recurre a este sistema, y lo cierto es que está funcionando muy bien, tanto para nosotros como para los clientes”, concluye esta vendedora, no sin antes resaltar que “hay otras pescaderías de la plaza en esta misma aplicación”.

Múltiples ventajas

Lo cierto es que los consultados sugieren que con esta herramienta “no solo ayudamos al planeta evitando que se desperdicie comida, sino que también ofrecemos un valor añadido extra con el que potenciar la plaza de abastos, pues en lugar de quedarnos anclados en el pasado lo que hacemos es adaptarnos a las nuevas tecnologías y a los hábitos de consumo actuales”.

“Todos salimos ganando, tanto la empresa que impulsa el programa ‘Too Good To Go’ como nosotros, que así vendemos producto que no íbamos a vender; pero también los clientes, que acceden a pescado más barato; y el planeta, ya que es una pequeña aportación a la preservación del medio ambiente”, sentencian los placeros.

Mejoría en las ventas

Todo esto en una plaza de abastos como la de Vilagarcía de Arousa, sujeta a no pocas polémicas últimamte y donde hay pescantinas que dicen haber mejorado sus ingresos en las últimas semanas, lo cual contrasta con el parecer de aquellas que aseguran que el mercado se va a pique.

Si queremos que la plaza funcione de verdad tenemos que respetar el reglamento y abrir a diario, para así ofrecer un buen servicio a la gente y seguir captando clientes

Vendedores de la plaza

“Si trabajas buen producto y pones precios razonables, la gente responde y acude a la plaza a comprar, porque sabe que aquí pueden encontrar producto fresco y de calidad”, esgrimen algunos de los vendedores.

Abrir los lunes

Otros anuncian que a partir de mayo podrían abrir sus puestos de pescado y marisco también los lunes –el único día, junto al domingo, que no están obligados a hacerlo–, “ya que se puede servir producto igual de fresco y la gente no tiene por qué esperar al martes para venir a comprar”, reflexionan.

Una postura también contraria a la de aquellos vendedores que se niegan a abrir sus puestos a diario –aún estando obligados a ello– y reclaman su “derecho a no trabajar”, mostrándose dispuestos a acudir a la plaza solo los martes y sábados, coincidiendo con los días de mercadillo ambulante.

“Si queremos que la plaza funcione de verdad tenemos que respetar el reglamento y abrir a diario, para así ofrecer un buen servicio a la gente y seguir captando clientes”, resaltaban ayer diversos integrantes de la asociación de vendedores del mercado de abastos que preside Raquel Albaladejo Bermejo.

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